ALTERACIONES DEL GUSTO Y OLFATO

El sabor de ciertos alimentos puede cambiar o alterarse temporalmente debido a ciertos tratamientos. Estas alteraciones, a menudo definidas como sabor metálico, pueden afectar el apetito. Aquí tienes algunas recomendaciones que podrían ayudarte:

Beber agua con limón o el té con menta ayudan a eliminar sabores extraños.
Si los olores resultan molestos, intentar servir los platos fríos o a temperatura ambiente.
Cocciones como el hervido, papillote, horno o microondas desprenden menos olor.
Tomar frutas cítricas y ácidas (limón, naranja, mandarina, piña...) para ayudar a hacer desaparecer el sabor metálico.
Extremar la higiene bucal, con enjuagues antes y después de comer para eliminar sabores.
Si se perciben sabores metálicos, utilizar cubiertos de plástico para comer y de madera para cocinar.

Si con estas recomendaciones sigue comiendo poco y persiste la pérdida de peso, puedes consultar con tu médico, dietista-nutricionista o farmacéutico